Para viajar a destinos tropicales
Consejos de un especialista del Hospital Muñiz. El Dr. Tomás Orduna dirige un equipo que se especializa en prevenir y tratar enfermedades que pueden afectar a los turistas en cualquier parte del mundo.
Consejos de un especialista del Hospital Muñiz. El Dr. Tomás Orduna dirige un equipo que se especializa en prevenir y tratar enfermedades que pueden afectar a los turistas en cualquier parte del mundo.
Además de tener las vacunas habituales, algunas regiones (OMS 2005) requieren certificados de vacunación contra ciertas enfermedades (como la fiebre amarilla) y para algunos destinos el médico podrá recomendar otras.
Los teléfonos para consultas son 4304 2180 / 6436 o 4306 7855 int 231 (Sala 9)
Enfermedades más frecuentes
La mitad de las consultas de viajeros que se reciben en el Muñiz son por enfermedades dermatológicas. Orduna enumera: "la que produce la larva migrante cutánea, dermatobiosis (producida por una larva de mosca conocida como ura), la tunguiasis (producida por una pulga) que en Brasil se conoce como Bicho do Pé, y la leishmaniasis cutánea".
En el segundo lugar aparecen los síndromes febriles producido por la picadura de algún insecto, mayoritariamente mosquitos: malaria (mosquito anófeles), denge o fiebre tifoidea. Y el podio lo completa la diarrea del viajero que según Orduna "tiene un popurrí de causas".
Fiebre amarilla
Una de las enfermedades que lo ocupan por estos días es la fiebre amarilla que tiene varios focos declarados en Brasil. "Si usted mira el modelo del desarrollo de la fiebre amarilla estamos ante la posibilidad de tener una epidemia importante. Por el momento no hay necesidad de preocuparse porque los focos están en zonas selváticas y rurales en Minas Gerais, Spiritu Santo, el sur de Bahía y en el norte de San Pablo, que son lugares a los que no viajan los turistas argentinos. Pero tenemos que hacer un seguimiento día a día dinámicamente".
El especialista explica que la enfermedad aparece primero en monos y mosquitos. Después en humanos. Desde 1937 existe una vacuna para esta variedad de la enfermedad muy eficaz que se obtiene con el virus atenuado. Si alguien va a viajar a una zona donde la enfermedad se está desarrollando, hay que vacunarse previamente.
La última vez que se detectó un minibrote de fiebre amarilla en la región fue en 2008, en Asunción. Hubo mucha alarma pero se controló.
"Lamentablemente -concluye Orduna- muchas agencias de turismo de todo el mundo son reacias a informarle al viajero los riesgos a los que puede estar expuesto en un destino por temor a perder un cliente. Esto ha sido estudiado por la Organización Mundial de la Salud. Por eso es importante que el turista reciba las recomendaciones desinteresadas de un especialista".